lunes, 10 de agosto de 2009

Los Maniseros son mortales



En mi pueblo no había carrito de “Manises”. La tradicional locomotora a vapor en miniatura no existía ni existe, yo la vi por primera vez en Montevideo, que fue el lugar en el que las conocí para mi total asombro. Fue en el Parque Rodó, era enorme, o por lo menos yo la veía así, bien pintada, muy prolija y hasta echaba humo por su chimenea.

Los gritos y la algaraza que me produjeron me hicieron tirar de los pantalones de mi papá que no tuvo otra opción que comprar los benditos maníes para el nene, o sea yo; que resultaron ser casi una estafa como casi todos los maníes comprados en la capital. La mayoría pasados otros crudos y en definitiva mucho mas caros y feos, que los que yo conocía.

Después vi algunos carritos más, en ciudades del interior como Las Piedras o Florida, pero nunca fueron iguales a aquella primera vez, pero los maníes eran mejores.

En el Tala, el manisero usaba una bolsa. Una enorme bolsa de brin marrón que el tiempo le había puesto una pátina como de ratón viejo. Tenía dos refuerzos de cuero en los extremos de su enorme boca y una correa gruesa y ancha, de color negro, que el manisero cruzaba en bandolera sobre su hombro izquierdo.

El manisero Álvarez, se llamaba Manisero, y era lo que casi siempre le comprábamos, “Manises”.
Manisero, ¿Me da dos jarros?, sacaba un pedazo de diario del tamaño adecuado, armaba el cucurucho en el momento, ponía los dos jarros y agarraba las monedas que iban a un bolsito de cuero atado a su cintura. Nunca volví a comer Manises como los del Manisero.

Claro que éstos no duraban todo el año y en enero no es muy apetecible ese manjar propio del invierno, pero el único oficio que tenía Álvarez era el de manisero, por lo que en enero lo llamábamos ¡MANISERO, MANISERO! Y cuando llegaba a nosotros le preguntábamos: ¿Manisero que vendés? En enero casi siempre eran helados, a veces caramelos, que eran los “candel“ Astra, y unos de maní que eran riquísimos, en primavera tanjarinas (tal como se llaman en el tala, y que conste que el término se encuentra en el diccionario de la Real Academia Española).

Hace pocos días me llamó mi papá dese el Tala y en la charla me preguntó:
¿a que no sabés quien se murió?........... El Manisero Álvarez!

SIPI, los maniseros son mortales.

En Montevideo ya no quedan carritos de Manises, pero en Tacuarembó si.
En el Tala ya no hay Manisero.

9 comentarios:

  1. Qué lindo Tordo.
    Siempre son hermosas las historias de infancia.Pero las del interior son más lindas todavía. Y vos las contás con mucha ternura.
    Y hacés que el Manisero Álvarez viva un poco más.
    Hace años que no veo un manisero ni manises con cáscara.
    Y nunca me había puesto apensar en la muerte de los maniseros. Hasta hoy.

    PD1: Cambiale el color al título del blog por otro más claro, que no se ve.

    PD2: No sé si el corderito me despierta ternura o gula.

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  2. Me mataste con los recuerdos,Tordo. En mi pueblo de la infancia -La Paz-, tal cual. Justamente hace unos días nos acordábamos con mi hermano, que en invierno, mi padre nos compraba un cucurucho de maníes a cada uno cuando se bajaba del ómnibus a la vuelta del trabajo. Cuando sentíamos de noche la llave en la puerta,porque él llegaba, no nos daban las patas para correr hasta el frente. Mi hermano se emocionó cuando le recordé eso. Y hace días también Mariana me ha repetido que en el super venden maníes con cáscara "baratísimos", que por qué no compro y hago. No lo voy a hacer, jamás me quedarían hechos al horno eléctrico como los del carrito del manisero, y jamás podrían competir en sabor con los de mis recuerdos.
    Algún día podríamos escribir un post referido a los oficios que conocimos y ya han dejado de existir. Por ejemplo,colchonero.jajajaja.
    Tordo, mirá que estoy esperando la buseca antes de que termine el invierno o que yo me ponga nuevamente a hacer dieta. Un abrazo.

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  3. ¡Momento! En Montevideo todavía quedan maniceros, sí señor. Pocos, pero quedan. Y me acuerdo de la locomotora (no sé si sería el mismo tipo, o en realidad en algún paraje ignoto lo que existía era un herrero que hacía esos carritos).
    Me hiciste recordar al panchero que pasaba por la calle General Hornos cuando yo era chica, al caer la tarde. Nunca volví a comer panchos como esos.
    Y ni bien vi el corderito, pensé lo mismo que el Santi... De las aves que vuelan, la que más me gusta es el cordero, no hay caso.
    Y de acuerdo con la Flaca, mirá si van a ser iguales los maníes en la Delne...

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  4. eee, se murió el manisero...
    es el mismo al que yo le compré maní, supongo
    nunca más comí maní en cucurucho
    ahora que se murió, menos chance todavía

    muy buen post

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  5. Vó, Tordo, a ver si le contestás a los amigotes que te visitan che.

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  6. Y andá a leer el periplo ecológico de mi héroe.

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  7. ¡¡¡Tordooooooooooooooooooooooooooo!!!!...

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  8. Perdón Perdón Perdón:
    1.-Máquina en CTI.-
    2.-estuve en campaña por mortalidad de terneros y allá la comunicación es imposible. Hasta los truenos y relámpagos son a leña.
    3.-regresé muerto, en cuanto pueda me cuelgo.

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  9. Colgate, pero a esta altura debieras dejarte ver!!!...Y no es por nada, pero se va terminando el invierno y nos estamos perdiendo la oportunidad de la tal mentada buseca. Si alguien la hace, tengo en el freezer: mondongo, chorizo caseros, chorizo rojo, pulpa de cerdo, pechito de cerdo,también guardo en la alacena porotos de manteca y garbanzos. Está todo a disposición, si no la hacemos es porque no queremos.

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